Hace pocos días nos ha dejó D. Juan Polo Velasco.
D. Juan fue mi maestro y mi amigo desde aquel lejano día, hace casi 40 años, en el que me abrió su estudio para dibujar y aprender de sus obras.
Persona afable, sencilla y profundamente creyente. Siempre recordaré nuestras animadas conversaciones sobre arte mientras modelaba y yo dibujaba con un carboncillo.
Me recibió como si estuviera en mi casa, tanto a mi, como a mi familia,sin importar el momento. Siempre tuvo tiempo para estar con aquellos que le visitaban.
Hoy puede ser un día triste para nosotros, pero yo se que te vas a reunir con muchos de tus amigos de siempre y sobre todo, con tu esposa: Maria Antonia.
Descansa en Paz, maestro.